martes, 13 de diciembre de 2011

Control, es mi Flujo de Efectivo

Melvyn Schmidt

Cuántas veces hemos tenido la interrogante de no saber quien realizó un abono a nuestra cuenta del banco, o si nuestro proveedor ya cobró su cheque y más aún, con qué fin se realizó una transferencia. Las respuestas a ello nacen del control del estado de flujo de efectivo.

Un estado de flujo de efectivo da a conocer las entradas y salidas de efectivo que resulta de las actividades de la operación, inversión y financiamiento de una empresa durante cada mes, en un formato donde se concilian los saldos de efectivo inicial y final. De esta manera, conciliar las entradas y salidas de efectivo ayuda a indicar que está sucediendo con el recurso más líquido de su empresa – su efectivo.

Un estado de flujos conciliado y revisado de manera periódica nos es útil porque da respuesta a las siguientes preguntas, sencillas pero importantes, sobre la empresa:

  1. ¿De dónde vino el efectivo que entró a nuestras cuentas?
  2. ¿Para qué se usó el efectivo que salió?
  3. ¿Cuál es mi saldo disponible descontando los cheques en tránsito?
  4. ¿Cuánto representa mis gastos bancarios por cada cuenta que tiene mi empresa?
  5. ¿Tendré un exceso en mis cuentas bancarias abiertas?

Por ello se recomienda que la administración de cada empresa implemente la estructura de Flujo de Efectivo como herramienta e indicador de uso constante para la toma de decisiones en su operación diaria.